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Tokyo 2020 | Baloncesto

España vuelve a chocar contra el muro de Estados Unidos y se queda sin medallas en la despedida de Pau Gasol

DANIEL FLORES
5 min.

Estados Unidos se ha vuelto a erigir, por quinta vez consecutiva en unos Juegos Olímpicos, en un muro infranqueable para la España de Pau Gasol, frustrada otra vez por los estadounidenses en los cuartos de final de Tokyo 2020 (81-95) y fuera de la lucha por las medallas por primera vez desde Atenas 2004. Agarrada a Ricky Rubio, que ha logrado su mayor anotación con el equipo nacional, la selección ha plantado cara en la primera parte y ha intentado seguir el ritmo anotador americano en la segunda, pero casi nunca ha parecido en disposición de ganar un partido con aroma a despedida de la mejor generación del baloncesto español.

La derrota ante Eslovenia en la última jornada de la fase de grupos había abocado a España a un desafío gigantesco para alcanzar las semifinales: derrotar a Estados Unidos, el equipo que apeó a la selección en Atenas 2004, también cuartos de final, y en Río 2016, en semifinales, y que impidió que tocara el oro olímpico tanto en Pekín 2008 como en Londres 2012, en dos finales memorables. En todas las ocasiones, con Pau Gasol como líder español.

El reto era aún más complicado en esta edición, en la que el conjunto dirigido por Sergio Scariolo no había transmitido buenas sensaciones en sus primeros partidos. A la hora de la verdad, las carencias del equipo se han mucho más evidentes ante el gran favorito al oro, especialmente en el aspecto físico, y con los grandes referentes fuera de foco.

Así, España se ha jugado el partido más importante del torneo olímpico con poco más de seis minutos de Pau y algo menos de diez de su hermano Marc; ninguno de ellos ha conseguido anotar y su ausencia en la pista en los instantes finales era la desgarradora constatación de que la mejor era del baloncesto español llegaba a su fin.

Pau Gasol valora su último partido con la selección

El fin de una época sin parangón

"Ha sido una etapa maravillosa", ha resumido Pau Gasol, de 41 años, en declaraciones a RNE, sumido en "una mezcla de sensaciones" tras la eliminación. "Me hubiera gustado no perder este partido, me hubiera gustado contribuir mucho más en este partido también, sobre todo me hubiera gustado ganar", señalaba, aún convencido de que las medallas estaban al alcance: "Creo que merecemos más de donde el campeonato nos ha puesto. Así es el deporte y así es la vida". Al igual que Pau, Marc Gasol, de 36 años, también ha anunciado que se retira de la selección.

Tal como España ha empezado a comprobar en este torneo, en el que ambos han llegado lejos de su mejor versión, será extremadamente difícil sustituir su capacidad competitiva, su intimidación bajo los aros y su aportación anotadora. Los Gasol, junto a jugadores como José Manuel Calderón, Juan Carlos Navarro, Felipe Reyes o Rudy Fernández -capitán de la actual selección-, entre otros, han sido los grandes protagonistas de una época que ha reportado al baloncesto español dos platas y un bronce olímpicos (2008, 2012 y 2016), dos campeonatos mundiales (2006 y 2019) y tres campeonatos de Europa (2009, 2011 y 2015).

A partir de ahora, el gran referente será Ricky Rubio, encumbrado ya en el Mundial de China de hace dos años y autor este martes ante Estados Unidos de 38 puntos, su anotación más alta en la selección y récord olímpico español. A él se ha encomendado Scariolo para intentar sostenerse en el partido, solo secundado por Sergio Rodríguez (16 puntos) y Willy Hernangomez (10), un escaso bagaje para hacer frente a una selección estadounidense en la que hasta cinco jugadores han sumado en dobles dígitos, con Kevin Durant (29 puntos) a la cabeza de todos ellos.

Estados Unidos agota a España

Con todo, España ha plantado cara en la primera mitad a las estrellas estadounidenses, mucho más aplicadas al llegar los cruces que en la fase de grupos. Pese a comenzar perdiendo, la selección española ha trabajado bien en defensa y Ricky Rubio ha empezado a ver aro con facilidad, sumando once puntos que han permitido llegar en ventaja al final del primer cuarto (21-19).

La igualdad se ha mantenido en el segundo cuarto, aunque España ha conseguido despegarse hasta diez puntos en el marcador (39-29, minuto 16) en un rapto de inspiración liderado por Sergio Rodríguez. Los estadounidenses no han dejado que la brecha fuera a más y Damian Lillard ha reflotado a los suyos, para llegar igualados al descanso (43-43).

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Hasta ahí ha llegado la resistencia española, incapaz de seguir el ritmo cuando los norteamericanos han elevado la intensidad defensiva: en casi seis minutos, España no ha sido capaz de anotar más que desde el tiro libre, siempre por medio de Ricky Rubio, y ha encajado un parcial de 6-22, con Durant ya desatado y todo Estados Unidos martilleando desde el triple.

Aunque el conjunto español ha recompuesto la figura y se ha acercado a seis puntos al final del cuarto, ya estaba al límite de sus fuerzas: un triple de Durant a falta de seis minutos ha abierto la brecha hasta los 15 puntos (66-81) y ha sentenciado la eliminatoria. El resto, para España, ha sido tristeza y nostalgia, con los hermanos Gasol contemplando desde el banquillo los minutos finales de un torneo que no ha tenido el colofón deseado. En cualquier caso, siempre quedará su extraordinario legado.

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