Esta edición del Tour de Francia está siendo una de las más bonitas de los últimos años. Mathieu Van der Poel -que debutaba en el Tour- y Wout Van Aert se han convertido en los principales animadores de la carrera, llevando su máxima rivalidad al más alto nivel en la primera semana.
La séptima etapa -la jornada más larga desde el siglo pasado con 249 kilómetros- supuso una bendición para el ciclismo, donde ambos corredores lucharon hasta la extenuación por alzarse con la victoria. Ambos corredores están reinventando un ciclismo que, hasta el momento, vivía de la explosión de los últimos kilómetros y ellos han sabido generar espectáculo en etapas de transición. Ausentes de estrategias, estos ciclistas ansían la victoria, sea una etapa de montaña o una etapa llana, dejándose el alma desde que se ponen un dorsal.
En contraposición, la alegría que han ofrecido este tipo de ciclistas se ha visto disipada por las caídas de los principales favoritos -veáse Primoz Roglic y Geraint Thomas- que han hecho que la primera semana prácticamente estuviese decidido el Tour de Francia con un Tadej Pogacar sublime.
“Pogacar está siendo muy superior a todos los demás“
"Pogacar está siendo muy superior a todos los demás. Sin el rival del año pasado, que era Roglic, está por encima de los demás y ya lo demostró en la contrarreloj. No se le ve fisuras. Este domingo, estaba solo, pero, aun así, tiene ventaja y está demostrando ser el más solvente de la carrera", remarca el exseleccionador nacional, Javier Mínguez.
Pogacar no cederá en la última semana del Tour
El exciclista profesional, Samuel Sánchez, está presenciando una edición interesante, con la salvedad de la lucha por la general, donde cree que Tadej Pogacar no cederá en la última semana del Tour de Francia.
"Es una edición diferente porque hay un claro dominador con una ventaja muy grande, pero hay muchos animadores de la carrera. Hemos visto a un magnífico Van der Poel o Van Aert y estamos viendo una lucha encarnizada por la montaña. Las fugas, a partir de ahora, vamos a ver muchos actores que van a pelear por la montaña pero que, entre ellos, van a tener que vigilarse para ir a las fugas. Está la incógnita si Tadej Pogacar va a ceder o no. Todo indica que no. Queda mucho Tour y vamos a ver lo que pasa. Está siendo una edición, más que interesante, curiosa, a todos nos pica la curiosidad de lo qué va a pasar en el día, pero claro, con un maillot amarillo sólido y con una diferencia de cinco minutos, en ese sentido, pierde interés por la general", puntualiza.
En ese sentido, Mínguez le queda ese mal sabor de boca de la retirada de Roglic, quién admite era su máximo rival.
“El líder no tiene enemigo porque Rogliz está en casa por una caída“
"El líder no tiene enemigo. Teóricamente los dos eslovenos eran los mejores y solamente uno le estamos viendo concursar porque el otro está en casa por una caída. Es el único pero que se le puede poner a la carrera, lo demás todo perfecto. Hemos visto otro tipo de corredores, como Van der Poel o Van Aert, y por eso ha sido espectacular, pero me queda el mal sabor de boca de decir: Pogacar, el mejor con diferencia, pero no tiene uno que le haga sombra. Son circunstancias de carrera y mañana se puede caer Pogacar, por tanto, al corredor no se le puede decir nada", remarca.
A parte de la nueva generación, que está devolviendo la ilusión, otros nombres veteranos salen a la palestra.
"El sábado vimos a un viejo rockero [Bauke Mollema], sin potenciómetro, donde también se puede ganar, es decir, por sensaciones, por pelotas y por capacidad y sufrimiento. Se hizo más de treinta kilómetros solo y ganó de una manera extraordinaria. Tiene grandes triunfos y se los gana siempre a pulso y llegando solo. Jugo a ganar, fue valiente y agresivo y tuvo su recompensa", subraya el exdirector deportivo, Álvaro Pino.
"Todos los años hay caídas"
Una de las cuestiones de las que se ha hablado bastante es que estamos ante un Tour de Francia muy accidentado, pero nada más lejos de la realidad.
Los expertos apuntan que la repercusión ha sido mayor por tratarse de ciclistas que luchaban por la clasificación general, como Roglic o Geraint Thomas.
“Todo el mundo se cree que puede ganar el Tour hasta que el Tour te pone en tu sitio“
"Si me pusieras todos los vídeos de las caídas de este año y los del anterior, diría, pues, es lo mismo. Lo que pasa es que se caiga un favorito y se vaya para casa [Primoz Roglic] a que no se caiga, cambia mucho la situación. Caídas hay todos los días. Quizá las llegadas deberían ser lugares un poco más adecuados para el gran grupo del pelotón y así evitar el peligro y, aun evitándole, habría las mismas caídas de todos los años porque, al principio del Tour, todo el mundo tiene fuerzas y todo el mundo se cree que puede ganar el Tour hasta que el Tour te pone en tu sitio y te demuestra que no lo puedes ganar que, solamente, lo va a ganar uno", comenta Mínguez.
En la misma línea piensa Pino. "El año pasado hubo unas caídas terroríficas también, lo que pasa es que el año pasado no pilló a gente tan importante involucrada que les dejara fuera de la clasificación general".
El exciclista gallego señala que "las primeras etapas de este año fueron de pánico, entre la velocidad que se llevaba y las llegadas, que eran bastante sinuosas, llevó consigo que parte de la batalla que podíamos tener de cara a la general se haya perdido".
“El Tour debería meter tres primeras etapas, con un puerto de segunda categoría“
En este aspecto, Pino incorpora una solución. "Por el bien de la carrera y del espectáculo, yo creo que el Tour debería meter tres primeras etapas, con un puerto de segunda categoría, y así seleccionar al personal para que llegaran los Valverde, Van Aert y algún otro corredor de media montaña y las tres siguientes etapas de cara a los velocistas. Y ahí se habría machacado mucho el nervio de la mayoría de los corredores, la gente va mucho más calmada, se hubiera posicionado la gente, más o menos, de la clasificación general y eso llevaría consigo el que no corrieras tanto riesgo de cara a ese final de cada etapa, que es tremendo, porque las carreteras son estrechas y quieren confluir todos entre los veinte primeros del pelotón", indica.
¿Es uno de los Tour de Francia más veloces?
La velocidad de los ciclistas en los primeros días del Tour de Francia está marcando unos guarismos que hace años no se alcanzaba. Los expertos señalan los motivos.
"Todos los equipos tienen muchos conocimientos, tienen herramientas para analizar a los ciclistas de la mejor manera posible y eso se nota en la velocidad y, sobre todo, de qué manera está configurado este año el Tour de Francia. Ha incitado a correr mucho", reconoce el exciclista asturiano.
“Las bicicletas y los materiales son el porqué de la velocidad“
Aun así, a Sánchez no le sorprende la velocidad que se alcanza en el Tour. "En el Tour siempre se va rápido, es una carrera muy nerviosa, donde todo el mundo quiere ganar, donde todo el mundo se gana el contrato del año siguiente. Cada vez el nivel medio de los ciclistas es más alto. Nunca hubo ciclistas malos, pero ahora mismo la gente se prepara muy bien", subraya.
A la nueva tecnología, se añade también el material. "Las bicicletas y los materiales son el porqué de la velocidad. No es lo mismo una carrera con la bicicleta de antes que la de ahora, cambia una barbaridad. Los corredores se alimentan mejor, se preparan mejor, pero tienen su fatiga como todos los años. A lo mejor también, para que haya más velocidad, tiene que haber más nivel y hay mucho nivel y más igualdad y eso hace que mejore el rendimiento y la velocidad de los corredores", apunta Mínguez.
No obstante, los profesionales consultados mantienen la misma opinión: la fatiga está haciendo mella en los corredores y la velocidad se reduce en la última semana.
“La fatiga está haciendo mella en lo corredores y la velocidad se reduce la última semana“
"Ya pasó el año pasado, la última semana se nota un bajón que años atrás no se notaba tanto. No había tanta velocidad en los primeros diez días. Lo vimos este domingo. Hubo un intento en el último puerto, por decir, ya estoy cumpliendo con el equipo, que vino tirando y acelerando, como el caso de Carapaz… Los ataques eran para cumplir expediente, nada más, de doscientos metros", manifiesta Pino.
El excorredor del Kelme resalta que la preparación actual de los ciclistas, cumpliendo una estricta alimentación o el control de los watios en los entrenamientos, acorta su carrera deportiva.
"Antes se decía en la época de Miguel Induráin: a partir de los veinticinco años es cuando estás formado para ganar un Tour, ahora se ve que no, pero eso lleva consigo que, seguramente, a la edad que pensábamos que antes era la edad de ganar el primer Tour, ahí se acabe su carrera deportiva", opina.
Sin victorias de los corredores españoles
Un corredor español no logra una victoria en el Tour de Francia desde hace tres años cuando lo consiguiera Omar Fraile en la decimocuarta etapa entre Saint-Paul-Trois-Châteaux y Mende. Han pasado varios años y es necesario resarcirse en la carrera más prestigiosa del mundo. Al fin y al cabo, sirve como escaparate, a los ojos de todo el mundo, para valorar la calidad de los ciclistas.
“El Movistar se ve un equipo muy reservado y acobardado, escondido, en momentos puntuales“
"La actuación española está dejando bastante que desear. Un equipo, como Movistar Team, el rendimiento del equipo, tanto el año pasado como este, está siendo muy por debajo de lo que tiene como presupuesto y de sus corredores. Se ve un equipo muy reservado y acobardado, escondido, en momentos puntuales. Este domingo, estuvo Alejandro Valverde, que no tiene que demostrar nada, pero los demás corredores no se vieron. Este año no pillan ni fugas. Sí, el otro día, estuvo Imanol Erviti, pero fue la primera que lograron en todo el Tour", señala el exdirector deportivo, Álvaro Pino.
Y pone el acento en Enric Mas. "Viendo a Enric cómo está actuando, que yo creo que no está mal, pero está muy reservado. Para un equipo pequeño, un Top-10 está bien, pero para un equipo, como Movistar Team, no te puedes conformar con hacer octavo o séptimo. Me la juego un día y arranco y si al final reviento, pues, si no hago octavo, haré el decimotercero. Fuera del podio, es ser muy conformista. Ahora que el Tour pasará por los Pirineos es un buen lugar para lograr la victoria, por la cercanía con nuestro país. Esperemos en los Pirineos, que está más cerca de casa, que van a tener a la afición en las carreteras animándoles, a ver si pueden conseguir ese ansiado triunfo de etapa porque creo que el podio lo tienen lejos", argumenta.