El número uno del mundo, Novak Djokovic, ha demostrado por qué es el rey de Melbourne al ganar su novena final del Open de Australia ante el ruso Daniil Medvedev por 7-5, 6-2 y 6-2, en solo 1:54 horas de juego.
En una final inédita en Grand Slam, el serbio no dio ninguna opción a su rival, se llevó su 18º título de un Grande y se queda a solo dos de alcanzar a Rafa Nadal y Roger Federer, que tienen 20. La mitad de esos 18 'mayors' los ha conseguido en el Melbourne Park donde ha alzado el trofeo en 2008, 2011, 2012, 2013, 2015, 2016, 2019, 2020 y 2021. Nueve títulos de nueve finales lleva en la Rod Laver Arena.
Pero en ninguna de esas ocasiones lo hizo con la autoridad de este domingo, en un partido que no llegó a dos horas de juego pese a que se citaban los dos jugadores más en forma del ciurcuito. Pero 'Nole' fue un huracán que dejó en nada el buen momento de Medvedev.
El partido no pudo comenzar mejor para el serbio. Djokovic salió a morder y le rompió el servicio a Medvedev en su primera oportunidad. Esto hizo que se colocara con un cómodo 3-0 a su favor en solo 8 minutos, pero el ruso no estaba dispuesto a bajar los brazos tan pronto.
Asestó un ‘break’ en el quinto juego y logró establecer el 3-3 en el marcador. La balanza se igualó y Medvedev despertó tras haber entrado frío al encuentro.
Esa igualdad se mantuvo con grandes intercambios de ambos tenistas, pero la eficacia de Djokovic al resto le sirvió para volver a romperle el servicio al ruso en el decimosegundo y llevarse el primer set por 7-5.
‘Nole’ sacó el rodillo
Pese a ese contratiempo, Medvedev intentó sorprender a su rival y dio el primer zarpazo al romper el saque al serbio en el primer punto de la segunda manga. Pero Djokovic reaccionó como nadie. No solo le hizo un ‘contrabreak’ si no que se anotó cuatro puntos consecutivos, rompiéndole también el saque en el cuarto punto.
Se colocó así con una cómoda ventaja de 4-1 con la que, además, lograba desestabilizar a su rival. Medvedev pecó en exceso de nerviosismo y desaprovechó su oportunidad de romper el servicio a ‘Nole’ en el octavo juego. Su impotencia la reflejó estampando la raqueta contra el suelo, pero al final llegó lo inevitable y Djokovic se llevó la segunda manga por 6-2 en su segunda bola de set.
El partido se puso más que cuesta arriba para el número cuatro del mundo. No solo por lo que supone remontar dos set al serbio en una final, si no porque a nivel mental Djokovic estaba fuerte y seguro.
Así lo demostró al volver a asestar un 'break' y colocarse de nuevo con un 3-0 de ventaja en la tercera manga. Intentó reaccionar Medvedev pero el 'Nole' no le dio opción y en su primera bola de partido cimentó su triunfo para seguir demostrando que es el rey de Australia.
Djokovic suma así su 18º Grand Slam y seguirá al frente de la clasificación mundial mientras se acerca s los 20 Grandes de Nadal y Federer.
Medvedev, por su parte, debe conformarse con subir un puesto en el ránking ATP, del cuarto al tercero, después de haber perdido la segunda final de un Grande en su carrera. En caso de victoria, hubiera arrebatado el número dos a Rafa Nadal.