El piloto francés Sebastien Loeb y su copiloto, Daniel Elena, han tenido que abandonar el Rally Dakar tras no poder completar la octava etapa por diversos problemas mecánicos.
Así lo informa la edición digital de L'Equipo, que recuerda que Loeb, nueve veces campeón mundial de rallys y que fue segundo en el Dakar de 2017 y tercero en el de 2019, ha estado perseguido por los problemas en su nuevo 4x4 construido por el equipo británico Prodrive.
El viernes, el alsaciano había pasado parte de la noche en el desierto después de romper un triángulo de suspensión en la sexta etapa. Su camión de asistencia no tenía la pieza adecuada, por lo que tuvo que esperar durante muchas horas en el desierto antes de poder finalmente reparar y volver a salir y terminar la etapa por la noche con más de diez horas perdidas.
El domingo, el día después del día de descanso, rompió un eje de su Hunter BRX en la séptima etapa camino de hacia Sakaka. Loeb y Elena se vieron obligados a pasar unas horas en el vivac y volvieron a salir el lunes por la mañana en la octava etapa, a 13 horas y media del líder de la general, su compatriota Stéphane Peterhansel, y con una sola rueda de repuesto.
Loeb se detuvo por primera vez en el kilómetro 43 de la especial. Después de un segundo pinchazo, se atascó de nuevo en el kilómetro 83 y el Loeb-Elena 4X4 finalmente salió de la especial al final del día después de varias horas de espera.
El 4X4 de Loeb-Elena dejó la etapa al final del día y el alsaciano dijo que su equipo tuvo que abandonar la etapa y pasó la información a los comisarios de la carrera. Terminó en la carretera de enlace e iba a llegar al vivac en Neom por la tarde.