El piloto de MotoGP Marc Márquez ha recibido el alta hospitalaria diez días después de su operación en el húmero, la tercera casi seguida, en la que le detectaron que tenía una infección, según ha informado este domingo su equipo Repsol Honda.
El de Cervera pasó por quirófano el 3 de diciembre para solucionar las nuevas complicaciones en la lesión que le ha impedido competir esta última temporada desde que se produjo la fractura en julio.
Honda ha informado ahora en un comunicado que los médicos han considerado que la evolución del piloto tras la última operación y el inicio de la terapia antibiótica ha sido "satisfactoria", por lo que podrá continuar la recuperación en su domicilio particular.
Márquez hizo un intento para volver a la competición en un tiempo récord, solo tres días después de la primera operación, aunque tuvo que desistir. Luego volvió a pasar por el quirófano tras la rotura de la placa que le habían colocado. Pero como la recuperación no iba bien, tuvo que volver a ser intervenido para tratarle una "pseudoartrosis" en una operación que se prolongó durante ocho horas.
Entonces le detectaron esa infección que le ha obligado a quedarse unos días ingresado en una clínica privada de Madrid y de la que tiene que seguir tratándose.
Nada más hacerse público el comunicado de su escudería, Márquez ha publicado en sus redes sociales un mensaje acompañado de un vídeo que aparentemente muestra la bienvenida que le han dado sus perros.