El partido entre el PSG y el Estambul Basaksehir de la Champions que se interrumpió el martes por un comentario racista del cuarto árbitro se ha reanudado este miércoles después de que los jugadores de los dos equipos y el nuevo equipo arbitral hayan escenificado su unidad contra la discriminación racial.
En concreto, todos los protagonistas del encuentro han rodeando el círculo central del campo con la rodilla en el suelo y algunos con el puño levantado, imitando el gesto de apoyo al movimiento antirracista Black Lives Matter.
El encuentro de la última jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones no terminó después de que en el minuto 14 se desatara la polémica cuando el cuarto árbitro se dirigió a Pierre Webó, técnico asistente en el cuadro turco, como "negro".
Los jugadores del equipo turco, con apoyo de los locales, interrumpieron el partido. Después de muchos minutos y consultas con la UEFA, el partido se aplazó a este miércoles con un nuevo cuarteto arbitral.
Así, el duelo se ha retomado un día después desde el minuto 14 con 0-0.
Además, en la grada del estadio del Parque de los Príncipes se han desplegado dos grandes lonas con el mensaje "no al racismo" (lema de una campaña de la UEFA) y otras pancartas en apoyo a la actitud de los futbolistas.
En lo deportivo, el PSG, ya clasificado, se jugaba el liderato del grupo H, en tanto que el rival, colista, no tenía ninguna opción. Al final, el poderoso conjunto francés se ha impuesto por 5-1 con un triplete de Neymar y avanza a octavos de final como primero.