Ficha técnica:
0 - Real Sociedad: Remiro, Monreal (Muñoz, min. 58), Llorente, Elustondo, Zaldua (Gorosabel, min. 75); Merino, Zubimendi; Oyarzábal (Isak, min. 75), Odegaard (Portu, min. 58), Januzaj; William José.
1.- Celta: Blanco, Olaza, Murillo, Aidoo, Vázquez; Rafinha; Bradaric (Araujo, min. 77), Beltrán (Brais, min. 46); Aspas (Saéz, min. 77), Mina (Smolov, min. 84) y Suárez (Nolito, min. 70).
Gol: 0-1, min 44: Iago Aspas, de penalti.
Árbitro: Prieto Iglesias (Comité Navarro). Amonestó a Monreal, Llorente, Zubimendi, Rafinha y Smolov.
El Celta de Vigo se aleja un poco más del descenso. Lo hace tras sumar tres nuevos puntos gracias a su victoria ante la Real Sociedad en Anoeta. Un gol que marcó Iago Aspas, desde el punto de penalti.
El conjunto gallego se queda ahora con 33 puntos, siete de ventaja respecto a la zona de descenso que marca el Mallorca (que debe jugar ante el Madrid). La Real, en cambio, se ve frenada en seco. Se queda conn 47 puntos después de perder su segundo partido consecutivo en casa y, ambos con polémica arbitral, y podría ser adelantada este jueves por el Valencia.
Penalti muy riguroso
Si importante fue la victoria por 6-0 ante el Alavés, mucho más lo es esta, por la mínima, ante los 'txuri-urdin'. Aunque el conjunto vasco salió con mas ganas y generando más ocasiones, el equipo celeste se llevó los tres puntos tras un polémico penalti señalado por el colegiado.
Prieto Iglesias no dudó en señalar la pena máxima cuando vio caer a Iago Aspas tras un agarrón de Llorente, en el 44. El VAR no entró a corregir la jugada y, aunque el contacto existió, parecía demasiado leve como para provocar la caída del delantero gallego.
Sin embargo, el lanzamiento de penalti se llevó a cabo y 'el príncipe de las Bateas' adelantó al Celta justo antes de marcarse al descanso. Un gol que subía la moral a los gallegos y hundía más a los de Alguacil que veían como, una jornada más, las decisiones arbitrales les perjudicaban.
Aspas marcaba así el noveno tanto de su carrera ante el equipo blanquiazul y demostraba que ha recuperado el olfato goleador.
En la segunda parte, el Celta se echó atrás, dejó la iniciativa a un equipo local que mordió en los primeros 15 minutos de la reanudación y pudo marcar por medio de Januzaj, en un libre directo en el minuto 61 al que Blanco contestó con una gran intervención.
Los vigueses quedaron maniatados, o hicieron que así lo pareciera, y los vascos llegaban una y otra vez a los dominios celtiñas, con Januzaj como principal artífice de las acciones ofensivas y Merino llegando a cada balón que se ponía en el área pequeña.
El Celta sufriría con los arreones finales de una Real que atacaba más con el corazón que con el cerebro porque su pólvora sigue mojada otra jornada más y celebró en el campo un triunfo que vale oro para escapar del peligro.