"Hubiese sido una locura que Argentina no estuviera en el Mundial", así se ponunciaba Messi tras la victoria y su 'hat-trick' en la remontada de la albiceleste ante Ecuador, que les ha permitido obtener el billete al Mundial de Rusia 2018.
Y es que hasta hace apenas 24 horas, ni la Argentina de Messi ni la Portugal de Cristiano Ronaldo tenían asegurado su pase a la fase final del Mundial que se disputará este verano en tierras rusas.
El delantero del Real Madrid fue el primero en certificar su presencia, tras la victoria de los lusos por 2-0 ante Suiza. Cristiano no destacó en su actuación y tampoco fue clave en la vistoria, aunque sí que fue el protagonista en la penúltima cita ante Andorra.
Peor escenario se le presentaba a Messi, que se jugaba el todo o la nada ante Ecuador. Los ecuatorianos se adelantaron a los 37 segundos, tras una jugada enlazada entre Roberto Ordóñez y Romário Ibarra.
Fue entonces cuando la 'Pulga' se puso el traje de superhéroe y encadenó un triplete que despejó cualquier duda para la alegría de todo un país. El úlitmo finalista del Mundial no se iba a perder la cita clave de Rusia.
Cristiano y Messi son los dos mejores futbolista del momento y ambos han dominado la última década del fútbol Mundial. Entre los dos se han llevado los últimos nueve 'Balón de Oro', cinco para el argentino y cuatro para el portugués. Además, vuelven a ser favoritos para llevarse el de esta edición.
El último carro mundialista
Messi cumplirá los 31 años en plena disputa del Mundial y Cristiano llegará con los 33 ya cumplidos. En plena madurez deportiva, ambos jugadores estarán ante la última oportunidad real de conquistar el único título que les falta a los dos para completar sus vitrinas.
Portugal irá a Rusia con la vitola de campeona de Europa. Mientras, Argentina llegará con la intención de quitarse la espinita de Brasil 2014, donde llegó a la final ante Alemania y se quedó con la miel en los labios gracias a Goetze. No fue la última final que perdió la albiceleste, en el camino al siguiente Mundial se ha dejado dos Copas de America.
"Por merecimiento, podríamos haber ganado las tres finales y no conseguimos ninguna. Sufrimos mucho para entrar a este Mundial. Ahora debemos estar tranquilos, disfrutar la clasificación y preparar con tiempo lo que viene", recalcaba el propio Messi tras lograr el objetivo.
Sin duda, tanto Messi como Cristiano ocuparán la mayor parte de los focos en Rusia, donde están llamados a capitanear sus selecciones y quién sabe si se podrá disfurtar de un partido entre los dos combinados, incluso, la diosa del azar podría enfrentarlos en una final que sería el 'desempate' entre los dos mejores jugadores de los últimos diez años.