La Copa siempre da sorpresas y este martes nos dejó un par de ellas. La primera, un clásico, un pez pequeño zampándose a uno grande, con la eliminación del Málaga en manos del Córdoba; la segunda, ver a Cerci de nuevo sobre un terreno de juego y con la camiseta del Atlético, algo que algunos pensaban que no volverían a ver.
Sucedió en el Calderón. Dos años después, Alessio Cerci saltaba al campo con la rojiblanca por orden de Diego Simeone, que le dio sus primeros minutos desde el 14 de diciembre de 2014. Casi media hora de juego en una eliminatoria decidida contra el Guijuelo.
El italiano llegó del Torino, 16 millones mediante, con la vitola de jugador talentoso, pero nunca ha conseguido convencer ni a su entrenador ni a la grada atlética, que vio como con apenas nueve partidos en sus botas tomaba rumbo a Milán y después a Génova antes de regresar a la capital de España.
Tras las cesiones una lesión el pasado verano se interpuso en su camino hasta hace tres semanas, cuando volvió a integrarse en el grupo y a contar como un jugador más aunque muchos ya ni se acordaran de que seguía perteneciendo al Atlético
"Yo nunca dejo nada de lado, al contrario. Todo lo que pueda sacar, potenciar o dar oportunidades soy el primero. Creo que en las dificultades están las oportunidades y Cerci ha pasado por muchas dificultades. No está todavía en su mejor versión, sin duda, pero está trabajando y está moviéndose bien", apuntó el técnico en la víspera del duelo.
"Alessio es un gran jugador, vemos que la gente lo aprecia, vitoreó cada jugada que tocó el balón. Está a disposición del equipo", declaró por su parte el 'Mono' Burgos, que compareció en rueda de prensa en lugar de Diego Simeone, que podría encontrar en el italiano una solución inesperada para su equipo.
El Córdoba lo vuelve a hacer
Es un especialista en llevarse por delante equipos de mayor categoría y lo ha vuelto a hacer. Había eliminado a tres 'Primeras' en los últimos cinco años y este martes hizo lo propio con el Málaga. El Córdoba ya es el primer 'matagigantes' de esta edición del torneo del K.O.
Lo hizo al zarandear al Málaga en una Rosaleda enfurecida con su técnico, Juande Ramos, y con su portero Boyko, que encajó cuatro goles en el 3-4 que les dejó fuera de la competición tras el 2-0 favorable al Córdoba en la ida.
Los cordobeses aguantaron bien la presión de un Málaga que se adelantó por medio de Sandro y a punto estuvo de igualar la eliminatoria pero el Córdoba aprovechó los huecos dejados por su rival y acabó llevándose el partido y el pase a octavos.
El Málaga, por tanto, queda eliminado como lo hicieron en su día la Real Sociedad, Betis y Racing, tres Primeras que cayeron en manos de un Córdoba especializado en campanadas coperas.