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Manchester City 0 - FC Barcelona 2 | Liga de Campeones

El Barça deja casi sentenciado el pase a cuartos

  • Los azulgranas vencen en el Etihad Stadium al Manchester City (0-2)

  • Messi anotó de dudoso penalti el gol que abrió el marcador del partido

  • Alves puso la puntilla tras una gran jugada al borde del minuto 90

Datos del Man. City 0 - FC Barcelona 2, ida de octavos de la Champions

ANTONIO SERRANO
7 min.

- Ficha técnica:

0- Manchester City: Hart; Zabaleta, Demichelis, Kompany, Clichy; Kolarov (Lescott, m.57), Touré, Fernandinho, Navas (Nasri, m.58); Silva, Negredo (Dzeko, m.74).

2- Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Mascherano, Alba; Xavi, Busquets, Cesc (Sergi Roberto, m.86); Alexis (Neymar, m.74), Messi, Iniesta.

Goles: 0-1: Messi, de penalti. m.54. 0-2. Alves, m.90.

Árbitro: Jonas Eriksson (Suecia). Mostró amarilla a Negredo y Kolarov (City), así como a Alves y Mascherano (Barcelona). Expulsó a Demichelis (City).

Incidencias: Partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones disputado en el Etihad Stadium (Manchester, Reino Unido).

El FC Barcelona ha tomado ventaja en la eliminatoria de octavos de la Champions League tras vencer en la casa del City por 0-2. El primer gol del partido llegó desde los once metros, fruto de un dudoso penalti de Demichelis sobre Messi. Alves puso la puntilla al borde del 90 como consecuencia de una pared con Neymar. [Datos del partido]

Si no hay sorpresas dentro de 15 días en el Camp Nou, el Barça estará por octava temporada consecutiva en el bombo de los cuartos de final. El 0-2 cosechado en el Etihad deja con muy pocas posiblidades de remontada al City, que necesita un 0-3 para obrar el milagro.

El resultado del marcador no ha reflejado lo que se ha visto en el choque. El Manchester City ha recibido un duro correctivo, a pesar de plantar cara a los azulgranas con un hombre menos desde el inicio de la segunda parte.

En la previa al partido ambos entrenadores hicieron hincapié en la necesidad de tener la pelota para hacer sufrir al rival, porque eso juegan ambos equipos, a tener la posesión.

El primero en cumplir su palabra fue el Barça, que se adueñó del partido completamente los primeros 15 minutos. La posesión de los culés era abrumadora, si bien, el fruto de la misma no se transformaba en ocasiones claras de gol.

El City intentó evitar el juego que caracteriza al Barcelona, presionando su salida de balón desde que Valdés ponía a circular el juego. Las largas asociaciones de los azulgranas daban al traste con esa estretegia.

A Pellegrini le tocaba ver desde el banquillo como sus hombres no tenían más remedio que recular hasta la misma línea de su área. Todos estaban metidos atrás, a excepción de Negredo, preparado para cazar una posible contra.

Transcurrido el primer cuarto de hora, el exazulgrana Yaya Torué recogió un balón en el centro del campo y condujo la bola con una de sus característcias arrancadas, que acabó con un centro defectuoso de Silva del que casi saca provecho Negredo. El colegiado sueco Jonas Eriksson pitó falta del delantero español sobre Valdés.

A partir de esa acción, los 'citizen' empezaron a tomar cartas en el asunto, como el boxeador que deja el primer asalto a su rival para analizar sus movimientos y contrarrestarlos en el siguiente 'round'.

La primera amarilla del choque la vio Alves por una falta sobre Clichy. Más que por la dureza de la acción, se llevó la amonestación por reiteración.

Los españoles Silva, Navas y Negredo fueron los creadores de las mejores ocasiones para el City. El delantero madrileño fue una pesadilla para Mascherano, que se las tuvo cuadradas para defender sus internadas.

El canterano del Real Madrid dispuso de la mejor ocasión de la primera mitad en el minuto 26, cuando recibió entre líneas un pase sensacional de Silva. Su corpulencia le valió para zafarse de Mascherano y Piqué, luego se escoró demasiado y su remate superó a Valdés. La bola se paseó delante de la línea sin llegar a entrar.

En la jugada siguiente el colegiado sueco perdonó un claro penalti de Clichy, que cortó con la mano un centro peligroso al punto de penalti de Alexis.

El propio Negredo fue el primer jugador del City en ver la amarilla por una falta sobre Busquets en el 28. El partido emepezó a calentarse sin mucho sentido y en el 36 Kolarov también fue amonestado por una entrada fea sobre el mediocentro culé.

Martino respiró más tranquilo a partir de la media hora de juego, cuando se fue aplacando el arreón 'citizen'. El Barça retomó los mandos del partido y, de nuevo, comenzó con su infructuosa posesión.

Salvo alguna internada de Iniesta por la izquierda y el tiro que se sacó desde fuera del área Xavi, los azulgranas apenas inportunaron la poretría de Joe Hart.

La última ocasión antes del descanso fue para el City. La jugada salió de las botas de Navas, que desde la derecha puso un centro perfecto al segundo palo, donde espara Negredo. El ariete remató de mala manera porque Alves estuvo listo para molestarle en el salto.

Un penalti marca el resultado

El regreso de los vesuarios dejó un comienzo muy similar al del inicio del partido, con el Barça buscando la posesión y el City presionando las salidas del balón.

Con los dos equipos tan mentidos en el partido y con las muestras de respeto que se estaban dando, el resultado apuntaba a un empate a cero y los dos conformes con jugársela en el Camp Nou.

Pero el guión se reescribió sobre la marcha en el minutos 52. Navas perdió el balón en el centro del campo ante una entrada de Busquets, que parecía falta, pero el colegiado dejó seguir la acción. La bola acabó en los pies de Iniesta, que utilizó su magia para poner un balón en profundidad a Messi.

El argentino se quedaba mano a mano delante de Hart cuando Demichelis le derribó por detrás; Eriksson no dudó en pitar pena máxima y sacarle la tarjeta roja. Las imágenes posteriores mostraron que el contacto fue antes de entrar en el área.

Messi, desaparecido hasta ese momento del choque, se encargó de transformar el panalti y puso el 0-1 en el marcador.

La expulsión del central obligó a Pellegrini a reconfigurar el equipo. Para ello dio entrada a Lescott en lugar de Koralov, con la idea de apuntalar la defensa. También quitó a Navas por Nasri, para dar más presencia en el centro del campo a los 'citizen'.

Con un jugador menos llegaron los mejores momentos del City, que se quitó la vergüenza y fue a por el empate para dejar abiertas las opciones de pase con vistas al Camp Nou.

En ese despliegue de fortaleza, los azulgranas encontraron una vía de escape por la derecha, donde Alves se adentraba sin muchas oposiciones una y otra vez.

Antes de que Negredo se marchase del campo tuvo una acción de gran calidad, que culminó Nasri con un lanzamiento que se estrelló en los centrales culés. El delantero dejó de tacón la bola atrás para que el francés sacase el chut, min. 62.

En el siguiente lance, Alves aprovechó el hueco por su banda para llegar hasta la línea de fondo y puso, con mucho criterio, el balón atrás, donde apareció Xavi para mandar el esférico por encima del travesaño.

No fue la última de la que dispuso el brasileño. Al borde del 70 se plantó delante de Hart tras una pared con Messi, pero erró el tiro por cruzarlo demasiado. A falta de 20 minutos para el final, Martino decidió dar entrada a Neymar en lugar de Alexis, que no tuvo su día en el Etihad.

De los pies de Touré a punto estuvo de salir el empate del City. El marfileño hizo un cambio de juego de 40 metros hacia Dzeko, que sin dejarla caer se la dio de primeras a Silva. El canario controló con el pecho y sacó un gran disparo que atajó con muchos reflejos Valdés, clave en la segunda parte.

En los instantes finales el City empezó a apretar para intentar el empate, pero una acción brillante entre Neymar y Alves por la derecha acabó con la sentencia del partido y casi de la eliminatoria. El brasileño no perdonó la segunda de la que dispuso, con un gran tiro cruzado al palo largo de Hart.

Los aficionados 'citizen' enmudecieron con el 0-2 anotado en el 89, que les dejaba con el mal sabor de boca de haber hecho un buen partido y verse casi eliminados de la Champions. Es la primera vez en la historia que el Manchester City disputa unos octavos de final de la Champions League.

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