A falta del acuerdo entre clubes, el centrocampista de la Real Sociedad Asier Illarramendi está a punto de convertirse en el cuarto fichaje del Real Madrid esta temporada. En realidad el tercero, si no se tiene en cuenta la incorporación de Casemiro, que jugó la temporada pasada en el Castilla.
'Illarra' tiene en común con Isco Alarcón y Daniel Carvajal, los otros dos recientes fichajes, su juventud y los éxitos con la selección sub-21, como el reciente título de campeones de Europa de la categoría.
Pero también comparte con el primero y con otro descubrimiento blanco, Raphael Varane, el haber sido 'cazado' por Zinedine Zidane. El francés siempre ha sido hombre de confianza del presidente Florentino Pérez desde que colgara las botas, y ya ejerció de cazatalentos con el fichaje de su compatriota.
En el caso de Varane, el beneficiado fue el técnico José Mourinho, quien reclamó la ayuda de 'Zizou' para ayudarle con la plantilla a modo de asesor e hizo notar su influencia en el resurgir de Benzema, también compatriota.
Pero en la última etapa se distanció del entrenador portugués, aunque nunca se separó del hombro de Florentino Pérez, quien volvió pedir su presencia con la marcha de Mou al Chelsea. Director deportivo, segundo entrenador de Carlo Ancelotti e, incluso, primer entrenador si hubiera fallado la contratación del italiano.
El hombre que puso cara a la novena Copa de Europa del Madrid fue considerado por Pérez en su candidatura como "uno de los activos más importantes del club" y el presidente le tenía preparado para asumir cualquier responsabilidad por agobiante que pareciera; tal es su confianza.
Después de Isco, ahora le devuelve la confianza con Illarramendi. La Real es más dura de convencer y no va a dejarle marchar a cualquier precio, pero al francés le bastó una llamada de teléfono para convencer al jugador.
Illarramendi, el relevo de Xabi
El centrocampista de Mutriku (Guipúzcoa), de 23 años, responde a un perfil parecido al de Xabi Alonso, también de origen 'txuri-urdin', quien a sus 31 años va notando la necesidad de oxígeno.
Illarramendi comenzó a jugar en el filial del conjunto donostiarra desde la temporada 2007-2008 y ya al año siguiente fue incluido en algunas convocatorias con el primer equipo, aunque su debut oficial no llegó hasta la temporada 2009-2010.
Martín Lasarte le hizo jugar 67 minutos en el partido contra el Elche que suponía la confirmación del regreso de la Real Sociedad a Primera División (4-1). En la temporada 2010-2011 aún siguió siendo jugador del filial, disputando solo tres partidos de Liga con el primer equipo.
Pero desde las dos últimas temporadas se ha convertido en uno de los fijos de Phillipe Montanier en un equipo en el que ha predominado el peso de la cantera. Lo único que le ha faltado en Primera es el gol, sin ser su especialidad, porque en el filial llegó a anotar siete en 93 partidos.
Sus otras cualidades le han catapultado a la selección sub-21, con la que ha ganado el reciente Europeo de Israel y ha sido incluido en el equipo ideal