El dúo español de natación sincronizada se metió al público en el bolsillo a ritmo del tango 'La Comparsita'; sin embargo, los jueces de estos Juegos de Londres no opinaron lo mismo y dieron una baja puntuación a las espeñolas en la rutina libre. España llega a la final de este martes (La 1 y RTVE.es, 16:00h, en directo) en tercera posición, por detrás de Rusia y China.
Mucha pasión y poca nota
Todo apunta al bronce. Andrea Fuentes y Ona Carbonell se quedaron en 96.59 puntos, con 48.28 en la impresión técnica y 48.31 en la artística. "Es muy poco. Estoy sorprendida. Este ejercicio era, como poco para 97", dice a la prensa Anna Tarrés, con visible cara de contrariedad.
“No valoran el trabajo que hacemos“
La seleccionadora nacional no se explica la baja nota: "No lo se. Quiero pensar que quizás nosotros estamos en un nivel superior y los jueces no son capaces de valorar el trabajo que estamos haciendo".
La prueba preliminar de la rutina libre es una referencia muy importante de cara a la final de las pruebas de 'sincro'. Su puntuación cuenta para establecer las finalistas y su orden de salida, aunque la media se sacará entre los puntos de la final y los de la rutina técnica.
“Veremos cómo podemos mejorar para la final“
Tarrés anunció que pediría explicaciones al juez español sobre el criterio seguido por quienes valoraron al dúo nacional. "Intentaré contrastar con la gente que estaba en la mesa para saber qué es lo que han visto y veremos cómo podemos mejorar para la final".
Visto desde la tribuna, el ejercicio de Andrea y Ona, pareció muy pasional y realizado con limpieza. Desde luego, Anna Tarrés también lo vio así: "Hay algo que mejorar, pero se les ha visto muy solventes, muy limpias, controlando la situación. En la final mejoraremos esta interpretación musical para hacerlo desde el sentimiento y conquistar más al público".
Pelea hasta el final
También las nadadoras llevaban en su cara la preocupación. "A ver que observamos en el vídeo técnicamente. Creo que este dúo de puntuación artística es de 10 o de 9.9, porque todo el mundo lo dice. Teníamos mucha ilusión y lo hemos luchado hasta el final. Mañana, a muerte. Tendremos que mejorar algo la sincronización y la potencia del final", explicó a RTVE.es Andrea Fuentes.
“Todo sigue siendo posible“
Por su lado, Ona Carbonell expresó su sentimiento: "No pensaba ninguna nota en especial, pero esta es baja. En las rutinas libres siempre se sube un poco la nota. Así que tendremos que luchar mucho en la final , en la que todo sigue siendo posible".
Con todo España se distanció en la pelea por las medallas de oro y plata. No ya de Rusia que, como dijo Andrea Fuentes a RNE: "Son de un planeta llamado: más alto que el nuestro". Natalia Ishchenko y Svetlana Romashina se llevaron 98.6 puntos por la ejecución de su ejercicio titulado 'Suspiria'.
China sí que obtuvo una mejor puntuación y esa situación podría repetirse en la final de este miércoles. Las subcampeonas mundiales se llevaron 12 centésimas más que las españolas con un impresionante tema musical de tinte oriental, titulado 'Dragón', que Huang Xuechen y Liu Ou ejecutaron de manera fascinante. En total les dieron 96.71 puntos, con 48.38 en la impresión técnica y 48.33 para la artística.
Canadá es el rival que podría sacar a España del tercer peldaño del podio, pero Boudreau y Marcotte puntuaron más bajo que las españolas. Su ejercicio, una mezcla de drama y comedia, inspirado en Shakespeare, obtuvo casi dos puntos menos. En total 94.75 puntos, con 47.32 en técnica y 47.43 en artística.