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Euroliga | Montepaschi 90-102 Real Madrid

Victoria insuficiente del Real Madrid en Siena (90-102); Gescrap hace historia

  • El Real Madrid gana, pero no puede anular la artillería del Montepaschi Siena

  • La histórica victoria del Gescrap obliga a una hazaña imposible a los blancos

  • Montepaschi, líder; Bizkaia se enfrentará al CSKA y el Real Madrid, tercero

RAMÓN PIZARRO
5 min.

Ficha técnica.

90. Montepaschi Siena (28+25+22+15): McCalebb (15), Carraretto (3), Stonerook (4), Thornton (7) y Andersen (11) -quinteto inicial- Ress (15), Zisis (2), Rakocevic (11), K. Lavrinovic (8) y Moss (14).

102. Real Madrid (26+26+24+26): Llull (5), Suárez (10), Singler (8), Mirotic (14) y Begic (7) -quinteto inicial- Carroll (7), Pocius (15), Velickovic (2), Sergio Rodríguez (7), Tomic (10) y Reyes (17).

Árbitros: Pukl (SLO), Dozai (CRO) y Lottermoser (GER).

El Real Madrid quedó eliminado en el 'Top 16' de la Euroliga pese a lograr un meritorio triunfo (90-102) en casa del líder del grupo F, el Montepaschi Siena, en un choque en el que la efectividad de los locales se unió a la falta de intensidad defensiva del conjunto español, sobre todo en la primera mitad. El éxito del Gescrap Bizkaia en Málaga obligó a los de Laso a intentar un hazaña casi imposible, ganar por 23 puntos de ventaja, a la que no llegaron.

No hizo un mal partido el Real Madrid en una cancha en la que Montepaschi es temible y, hasta este jueves, invicto. Incapaces de parar la efectividad anotadora de Rakocevic (11 puntos), Moss (14) y Ress (15 puntos también) , los blancos no pudieron sacar partido de sus buenos números y del mérito de su triunfo. Felipe Reyes, 17 puntos y 14 de los ¡46! rebotes de su equipo, que tuvo un 67 por ciento de acierto en tiros de dos; Pocius, 15 puntos y Mirotic, 14.

El Madrid necesitaba un defensa muy fuerte y machacar al ataque; sin embargo no pudo encontrar el ritmo adecuado para frenar el ataque del rival. Montepaschi anotó y anotó, lo que hizo imposible a los blancos la hazaña de ganar por 23 puntos de ventaja. Y eso que el Real Madrid afrontó con la única actitud posible este decisivo encuentro: no fijarse en lo que sucediera en el Martín Carpena de Málaga, apretar los dientes e intentar la machada.

Un festival de anotación

Los de Laso intentaron controlar de salida el encuentro y si lo consiguieron en el tiro interior, lo tuvieron mucho más complicado en el exterior, en un enfrentamiento en el que ambos equipos alcanzaron un tremendo poderío anotador.

El primer cuarto se convirtió en un festival de triples, en el que Montepaschi metió cuatro (con un 57 por ciento de acierto) y el Real Madrid, tres (para un 60 por ciento). Súarez y Llull llevaron con tino el juego madridista ante los poderosos jugadores locales, el primer tiro de Carroll fue un triple fantástico, pero McCalebb volvió a marcar distancias.

El choque pasó por más momentos de emoción que de calidad y el Real Madrid llegó con 28-26 en contra al final del primer cuarto; mientras, en Málaga, el Unicaja ganaba por un solo punto al Gescrap.

Ress, Rakocevic y Carroll siguieron enchufando de tres, en un choque volcado al ataque. Una situación en la que Montepaschi sacó sus mejores armas con un Tomas Ress inspiradísimo arriba y también en el tapón que le puso a Mirotic.

Montepaschi se lanzó mediado el segundo cuarto con un parcial de 5-0 que hizo que Laso tuviera que pedir tiempo muerto para frenar la sangría (44-39 en el minuto 15 de juego) y que amplió hasta la máxima ventaja de siete (48-41) instantes después.

Las sucesivas entradas de Felipe Reyes, Pocius y Sergio Rodríguez tampoco pararon el ritmo con el que el Real Madrid recibió puntos. Es cierto que los blancos respondieron con contundencia a cada ataque y lograron recuperar, para llegar al descanso con un esperanzador 53-52. A esas alturas, Gescrap le había dado la vuelta a su compromiso y ganaba por dos puntos.

Los de Laso anotaron mucho, pero encajaron mucho y así fue imposible lograr el objetivo. Un parcial de 9-2 para Gescrap al inicio del tercer cuarto ante Unicaja avanzó que los vizcaínos iban a cumplir su parte de la tarea para estar en los cuartos de final.

Defender bien o atacar mejor

En Siena, los minutos pasaron para desesperación de un Real Madrid que volvió a tener ventaja en el marcador (53-54) en el minuto 23 de juego. Las defensas mejoraron y los blancos aceleraron en la pintura, con un parcial de 6-0, que llevó el choque a 56-62 un minuto después. Pero Montepaschi supo buscar y aprovechar el más mínimo error del rival para seguir cerca. Begic perdió el balón y Moss volvió a meter a los locales (66-66 a los 27 minutos).

Fueron unos minutos en los que despareció McCalebb y surgió Moss para matar esperanzas madridistas. Así se llegó al tercer cuarto con 75-76, en tanto que el Bilbao estaba ganando por seis puntos.

El cuarto decisivo llevó hasta Siena el resultado de Málaga en los instantes finales: Unicaja 51- Gescrap 50 a falta de dos minutos. Más emoción no podía pedirse. Sergio Rodríguez cogió las riendas del equipo y con un triple puso el 77-83 a favor a falta de ocho minutos. Aún había posibilidades. Máxime cuando la ventaja madridista ascendió hasta los 11 puntos en los últimos cinco minutos.

Entonces se consumó el histórico triunfo del Gescrap en Málaga (55-59) y al Real Madrid ya no le quedó otra que la heroica. Se fajaron bien los hombres de Laso, pero el objetivo ya estaba demasiado lejos. La falta de intesidad defensiva del primer tiempo acabó siendo una losa.

Victoria insuficiente para el Real Madrid, que queda eliminado, en tanto que Gescrap Bilbao hace historia en la Euroliga y se mete por primera vez en cuartos de final, en su debut en la competición continental. En la siguiente ronda el Barcelona jugará con el Unics Kazán, el Gescrap Bizkaia con el CSKA, el Montepaschi, como el año pasado, con el Olympiacos y el Panathinaikos con el Maccabi.

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