Ficha técnica:
1 - Villarreal: Diego López, Ángel, Gonzalo, Godín, Capdevila, Cazorla, Ibagaza (Marcos Senna, m.46), Bruno, Cani (Llorente, m.46), Nilmar y Rossi (David Fuster, m.82).
4 - Barcelona: Valdés, Dani Alvez, Piqué, Puyol, Maxwell, Busquets (Touré Yayá, m.80), Xavi, Keita, Pedro, Bojan (Ibrahimovic, m.85)y Messi (Jeffren, m.89).
Goles: 0-1, m.63: Messi. 0-2, m.34: Xavi. 0-3, m.42: Bojan. 1-3, m.68: Llorente. 1-4, m.88: Messi.
Árbitro: Teixiera Vitienes (colegio cántabro). Amonestó por el Villarreal a Gonzalo, Godín y Capdevila y por el Barcelona a Keita, Puyol y Busquets.
Incidencias: partido disputado en el campo del Madrigal ante 23.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.
El Barcelona ha dado un paso de gigante en su carrera hacia la Liga con un contundente 1-4 en Villarreal. El rival, a priori, más complicado que le quedaba a los de Guardiola ha sido un juguete en manos del líder, que ha recuperado su mejor versión en El Madrigal en un momento que se antojaba decisivo en el devenir del campeonato.
Después del golpe anímico de la eliminación en Champions, el choque ante un Villarreal que lucha por los puestos europeos era toda una prueba de fuego para el equipo azulgrana, que ha resuelto la papeleta en 45 minutos, con los goles de Messi, Xavi y Bojan, que no ha dejado pasar la oportunidad que Guardiola le ha brindado, en detrimento de Ibrahimovic, el gran damnificado por la eliminación europea.
Entonces el Barcelona apenas logró disparar a puerta durante todo el partido. Este sábado, en solo cinco minutos ya había creado dos ocasiones claras. Un balón picado de Messi que sacó Diego López con una mano espectacular y un remate en plancha de Puyol en el córner consecutivo fueron los primeros avisos de un equipo que no quiere especular con la Liga.
No obstante, el partido podría haber sido muy diferente si Nilmar hubiera acertado en los primeros minutos del choque, cuando tuvo hasta dos ocasiones clarísimas de abrir el marcador. La primera, en el minuto 4, erró con la portería vacía después de una mala salida de Valdés. Tres minutos después, el brasileño ganó la espalda a la defensa azulgrana pero su disparo se marchó alto en el mano a mano con Valdés.
Lluvia de goles sobre Diego López
En apenas diez minutos, el público de El Madrigal ya había disfrutado de cuatro oportunidades de gol, dos por portería. El partido prometía un duelo equiparado pero prontó cayó del lado catalán. Después de dos nuevas ocasiones de Xavi y Messi, el argentino ya no perdonó y firmó el primero de la noche.
Una jugada comenzada por Bojan y continuada por un excelente pase de Xavi fue definida por el 'Balón de oro' con la ayuda de la fortuna, que quiso que el balón tropezara en Godín y lo desviase de forma definitiva hacia la red de Diego López.
El primer tanto azulgrana noqueó a los locales, que sufrieron el mejor juego del Barça de sus últimas semanas, gracias a la profundidad de Maxwell y Alves por las bandas. Además, la presión en el centro del campo de Busquets y Keita ahogaron cualquier intento del Villarreal.
Al filo de la media hora, una falta de Gonzalo en el borde del área fue el preludio del segundo gol. Xavi ejecutó a la perfección la falta por encima de la barrera, lejos del alcance de Diego López. Una obra maestra que aportaba tranquilidad al líder.
Con el 0-2, el Barcelona no se relajó y buscó el tercero. Messi pudo conseguirlo pero se durmió en el área después de una buena jugada colectiva. Tuvo que ser Bojan el que lo lograra con una jugada magistral. El canterano se deshizo de Gonzalo con un autopase y se marchó por velocidad para definir ante Valdés con un perfecto tiro cruzado. Golazo para Bojan, que demostró estar en un gran momento de forma.
El Villarreal planta cara en la segunda parte
El Villarreal reaccionó al inicio de la segunda parte, en la que el Barcelona, con los deberes hechos, aflojó la presión y sufrió el avance de las líneas amarillas, que comenzaron a crear oportunidades por mediación de Cazorla, Nilmar y Llorente.
El delantero guipuzcoano fue el encargado de anotar el gol del honor local, con un chut con el exterior imparable para Valdés, después de un gran pase en profundidad de Nilmar. El tanto aplacó la polémica de la jugada anterior, en la que Cazorla había quedado tendido en el suelo tras una dura entrada de Alves que el árbitro obvió.
La polémica arbitral no se quedó ahí y continuó con una extraña jugada en la que Teixeira Vitienes enseñó una tarjeta amarilla a Llorente por empujar a Busquets cuando éste iba camino del vestuario. Las quejas del azulgrana confundieron a todos y parecía que la tarjeta fue para él, la que hubiera sido su segunda y, por tanto, roja del barcelonista, con el consiguiente cabreo de la afición del Villarreal.
Cuando el partido ya estaba decidido, Messi, muy individualista en la recta final del encuentro, anotó el cuarto y postrero gol de su equipo, que se pone cuatro puntos por delante del Real Madrid, que, de nuevo, partirá ante Osasuna con la presión de ganar para seguir mantiendo sus opciones por el título. Opciones que, semana a semana, sigue reduciendo el Barcelona.