Como un excelente estratega. Así se desveló Hiroshi Aoyama en su triunfo ante Álvaro Bautista en los últimos metros de la carrera del GP de España. En sus 36 carreras en 250cc, Aoyama ha ganado en seis ocasiones. Y en este Gran Premio de Jerez, el japonés dio una lección de estrategia. El piloto del equipo Scott batalló de lo lindo con Bautista y al final, se llevó el gato al agua.
El japonés de Honda, cuya última victoria databa de 2007, en Malasia, tenía ganas de devolverle la moneda al piloto de Talavera. Bautista ganó en su casa, en Japón. Por eso Aoyama se tomó la revancha ganando en territorio español.
La carrera fue espectacular, con cuatro protagonistas muy claros. Aoyama, Bautista, Simoncelli y, ya en un segundo plano, pero pegadito a la cabeza, Héctor Barberá. Con la caída del 'poleman' Alex Debón a falta de 17 vueltas para el final, estos cuatro pilotos se destacaron al frente de la carrera. Los adelantamientos entre Aoyama, Bautista y Simoncelli eran constantes, con un Barberá que prefería mirárselo desde una distancia prudente.
El piloto nipón, a bordo de una Honda, dio muestras de su inteligente lectura de las carreras. Estudió a sus rivales para aprender dónde poder pasarlos. Una información a la que sacó el máximo rendimiento en la última vuelta, cuando adelantó a Bautista en los últimos metros al abrirse demasiado el español. Álvaro Bautista tuvo que conformarse con la segunda plaza del podio.
El tercer cajón del podio fue para Marco Simoncelli, que en los últimos metros salió ganador de su duelo con Héctor Barberá. El italiano del Metis Gilera, defensor del título, pisó el podio por primera vez esta temporada.
Este resultado trae cambio de líder. Hiroshi Aoyama es el nuevo referente en la general, abriendo un hueco de cuatro puntos con Álvaro Bautista. Héctor Barberá es tercero. Y Simoncelli, décimo.